DESCUBREN SINAGOGA DEL S XIII EN UN GARAJE

Un garaje de Castellón de Ampurias (Gerona) escondía una de las más importantes sinagogas de la judería gerundense.

En 1825, la familia Comas adquirió un local en Castellón de Ampurias donde guardaron, primeramente, los aperos de labranza y el ganado que cuidaban en esa localidad del Alto Ampurdán, y después, con el paso del tiempo, lo utilizaron como cobertizo y cochera. Nunca sospecharon que el lugar pudiera haber albergado una de las dos sinagogas de la localidad, en la que hasta 1492 había una judería de 300 judíos.

Hace unos veinte años, el historiador Miquel Pujol -capellán nacido en el pueblo y fallecido no hace muchos años- hizo algunas prospecciones en el garaje de los Comas y fue quien empezó a sospechar sobre lo que había allí.  Años más tarde, y durante un período de dos años, las informaciones de Pujol se vieron corroboradas por una excavación arqueológica: los cimientos son una sinagoga.

La familia no sabía nada de esto, pero se sintió tan interesada por ello que la hija mayor del actual propietario decidió estudiar Historia. Y los resultados de la excavación están publicados en  en el último número de la revista científica Annals de l’Institut d’Estudis Empordanesos, firmados por la arqueóloga Anna Maria Puig y el historiador Josep Maria Gironella.

Un video realizado por el periódico La Vanguardia:

Según esta documentación, esta sinagoga data de 1264. Tiempo después, en 1321 se produce una importante reforma que precisa de una licencia que otorgan  el obispo de Girona y el conde de Empúries. La reforma consiste en una ampliación y consta la compra de dos casas adyacentes para ello.

Según ambos expertos, el estudio del historiador local Miquel Pujol describe con mucho detalle cómo era la sala donde se encontraba la “scola superior sive judeorum masculorum” -la parte de los hombres; dónde había los asientos (“locum sedendi”)  dispuestos en orden frente al  Tabernáculo, situado en una pared donde había la puerta del “Arón Ha Kodesh”y la “Tevá ”,  plataforma escalonada desde la que se dirigía el oficio y leía la Torá.

El pórtico de la entrada , netamente sefardí, estaría construido por Arnau Font. Dado el tamaño de lso restos encontrados se supone que muy cerca debe haber una Mikve.

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