EL DR. EFRAÍM BUENO

 Importante sefardí de Amsterdam en el S  XVII  que además de traducir los salmos del hebreo al español se  dedicó a la medicina, las artes  e incluso  la filantropía.


Bueno, según Rembrandt

Bueno es apellido  antiguo y aragonés, pero no se ha podido determinar exactamente el lugar de origen; en la alta Edad Media, aparece una casa solariega con tal nombre en el Valle de Mena, de Burgos, pero también en diferentes lugares de Aragón: Sos del Rey Católico, en Zaragoza (donde aún abunda el apellido) y  también en  las localidades de  Acumuer y Jaca, en Huesca, desde  donde, en tiempos del Rey Jaime I,  algunos de estos oscenses -en especial oscenses judíos- pasaron al Reino de Valencia, entonces recién creado como tal, para repoblar el territorio reconquistado y disfrutar de las prebendas concedidas por la Corona a quien se animara a vivir en esas zonas entonces conflictivas.

La familia Bueno pasa a Portugal -como tantas otras, huyendo del acoso la Inquisición. Luego tuvieron también que huir también del reino portugués, generalmente marchándose a Amsterdam, primero, y  a Londres, después. Esta vía tradicional es la que tomaron los Bueno conversos, que en aquella época donde el latín era lengua de prestigio, se hacen llamar Bonus.  Otros, los Bueno no conversos, serían los que se radicaron en el Imperio Otomano, especialmente en Tesalónica.

El dr Bueno retratado por su amigo Rembrandt

En la localidad portuguesa de Trancoso, cerca de La Raya (con España) nació Pedro Alvarez de Mesquita, a quien en 1660, viviendo en Castello Rodrigo con su esposa Beatriz Nunes, se le abrió proceso inquisitorial en Coimbra (Processo de Pedro Alvares-Arquivo Nacional da Torre do Tombo) Este Pedro fue padre de Yosef Bueno, que estudió medicina en Burdeos, pero que, en 1599,  fue padre en Castello Rodrigo de un hijo, a quien llamaron Efraím Ezequiel. De converso, Martín Alvarez Bueno.

Como primero hiciera su padre, Efraím, ya de  bastante adulto, estudiará  medicina en Burdeos, Francia, donde se había  instalado una colonia de sefardíes aragoneses repoblada con judíos anusím de Portugal.  Pero el oficio de la medicina  no lo ejercerá ni en Portugal ni en Francia: en el país galo  podía estudiar, en eso no había problema,  pero no  podía ejercer y menos aún con cristianos; así que ejercerá como médico en Flandes -el periplo seguido por  Bueno era muy habitual- y concretamente en Amsterdam. En algunas ocasiones atendió al príncipe de la Casa de Orange, la que hasta hoy será la casa regente de los Países Bajos. Tan reputada era su labor como médico.

Además, también cultivó las artes y las letras, en especial la poesía, relacionándose con el círculo literario entorno a rabí Menashe ben Israel -la llamada academia del «Conciliador».  Con Ben Israel, Bueno conocerá las artes de la imprenta, que le interesarán muchísimo. Ben Israel fue, además del  más íntimo amigo del rabino mayor de los sefardíes de Amsterdam, un  erudito que, tras estudiar con sabios marroquíes, había escrito una gramática de hebreo a la inaudita edad de  17 años. Fue el primer librero e impresor sefardí en Amsterdam y de esa editorial salió la carta que el rabino de Amsterdam , Ben Israel, envió a Oliver Cromwell sugiriendo la abolición del establecimiento de los judíos en Inglaterra.

Bueno, que era médico famoso y solicitado, financió muchos grabados para la editorial de Ben Israel. Por otra parte estaba tan cercad el mundo artístico y sus representantes que  incluso posó como modelo para Rembrandt, de quien era amigo personal.  El retrato cuelga en el Rijksmusuem . Y  hay otro, en el que  baja por una escalera, en  el  MET de N.Y. También posó para Jan  Levins.

Bueno, por Jan Levins

Su labor literaria, muy apreciada, incluye  la traducción; la primera obra que tradujo, al español, fue ni más ni menos que el Sefer Tehilím,  Libro de los Salmos, que publicó  en Amsterdam, en 1650, con el título de :   «Psalterio de David, en Hebrayco Dicho Thehylim, Transladado con Toda Fidelidad Verbo de Verbo del Hebrayco». Aquí una de sus páginas :

No sólo es una traducción de la lengua hebrea original al castellano del Siglo de Oro, sino también una guía de cuándo leer cada salmo según el mes hebreo y según hasta ese momento ya era tradición antigua. En el año 1723 tuvo una segunda edición, de tanto éxito como cosechó. La obra también tuvo la colaboración de Yona Abravanel.

Desde el punto de vista creativo escribió un opúsculo exegético sobre ciertas partes del Midrash Rabá, los midrashím legendarios de todos los libros de La Torá, lo cual es una labor ingente además de interesante para todo aquel que se lance al mar llamado Talmud.

En el año de  1656, junto a otros,  como  por ejemplo Abraham Pereira, fundó Or Torá, (La Luz de la Torá)  una importante sociedad filantrópica y científica de Amsterdam. Su vida comunitaria una vez hubo retornado al judaísmo fue no sólo muy activa sino como vemos también muy productiva, con grandes aportes para el desarrollo de los judíos de Amsterdam, que luego serán la base del desarrollo de la comunidad de Londres y Manchester y, a la postre, también de Nueva York y Filadelfia, entre otros lugares epicéntricos de la judería sefrdí a lo largo y ancho de todo el mundo.

Bueno casó dos veces. La primera con  Esther Harari, nacida en 1607 , que falleció a los 21 años de edad, probablemente al dar a luz a un hijo al que llamaron Yosef, como el abuelo paterno, para seguir la tradición. Luego, se desposó con Judith, nacida en Sao Joao de Pesqueira en 1607, y fallecida en Amsterdam el 20 de mayo de 1670. No consta descendencia.

El dr. Efraím Bueno falleció el ocho de noviembre de 1665. Tanto él como su esposa fueron enterrados en el hoy viejo cementerio judío de Amsterdam, Beit Jaím Ouderkerk aan de Amstel, con el resto de grandes nombres de tan gran época para los sefardíes de los Países Bajos.