II PARTE DE ESPÍAS Y AGENTES NAZIS EN CÁDIZ

Siguiendo con el asunto del espionaje y el nazismo en Cádiz, Fernando Soto nos tra la segunda entrega del estudio.


Para leer la primera parte, pinchar en este enlace

 

En esta ocasión veremos las aventuras de Otto-Hans Meissner, nacido en Estrasburgo en 1909 e hijo de Otto Meissner jefe de la Cancillería Presidencial de Adolf Hitler. Escritor y periodista Freelance destinado entre otros lugares a España.

Entre los años 1929 a 1933 asistió a las universidades de Heidelberg, Lausana, Grenoble, Friburgo, Berlín y Gotinga así como el prestigioso Trinity College de la británica Universidad de Cambridge.

Staatssekretär Meißner

El 12 de diciembre de 1933, fue admitido en la SS, en el llamado «SS-Mecánico» (el 1 de mayo de 1940, desarrollaría un aturdidor para prisioneros). Según los propios datos de Meissner en su autobiografía, se dice que Josiah Waldeck y Pyrmont sugirieron esta membresía. En febrero de 1934, Meissner ingresó al servicio diplomático como funcionario del servicio superior en el rango de agregado. Inicialmente perteneció a la División IV «Europa del Este, Escandinavia, Asia Oriental«. Entre los oficiales jóvenes que llegaron al servicio con él estaban Ernst vom Rath.

En 1934, Meissner en el cuartel de la Leibstandarte SS Adolf Hitler en Lichterfelde, el ex Hauptkadettenanstalt – en el que había sido convocado junto con otros miembros de la división de Berlín del motor-SS en el orden en el caso de SA para defender la institución -Erhebung – testigo de ejecuciones, en el curso de la ola de depuración política conocida como «Röhm-Putsch «.

Desde septiembre 1939 hasta marzo 1940 fue transferido al Departamento de Información del Ministerio de Asuntos Exteriores en Berlín en la División II (Inteligencia Militar y el servicio de propaganda) ocupado, y después de marzo a julio de 1940 en la embajada alemana en Moscú.

En esta función, él tomó parte en la reunión de la campaña extranjera anti-judaica bajo el mando de Horst Wagner a principios de abril de 1944 en Krummhübelparte en la que se ocuparon de los «asuntos judíos» donde intentaron enviar mensajes para que Europa no se interesara en la persecución de los Judíos y en fortalecer las actividades de propaganda en contra de un Enjuiciamiento público de la persecución de los judíos.

Con este espeluznante historial, su relación con Cadiz viene cuando Meissner pudo estar durante al menos un año en Cadiz, en el consulado honorario de Alemania después de 1944 realizando diversas operaciones secretas de propaganda.

Sin embargo, los servicios de inteligencias americanos tuvieron dudas de su estancia en el consulado de Cadiz, si existen documentos secretos desclasificado que le persiguieron y donde se observa que al menos si piso suelo gaditano durante breves periodos de tiempo como pueden ver en las fotografías adjunta, sobre todo, en el verano de 1944.

Después de la guerra Meissner negó la autenticidad de las actas de la reunión de la conferencia Krumm Hubler realizadas a partir de abril de 1944 y negó en una audiencia sus sugerencias en el mismo sobre los documentos antisemitas. Después de su liberación de la inteligencia estadounidense en octubre de 1947, Meissner trabajó como periodista independiente y escritor.

Ya que hasta 1991 publicaría numerosos reportajes de viajes, novelas y biografías de grandes exploradores. Se agregaron a esto escritos autobiográficos y trabajos sobre la historia más reciente. Sus libros fueron traducidos a numerosos idiomas, incluidos búlgaro, danés, inglés, finlandés, francés, italiano, holandés, noruego, polaco, portugués, ruso, sueco, esloveno, español y checo.

También fue orador público del Instituto Alemán de Formas de Vida, una oficina en la que fue elegido en el congreso fundador de Bad Pyrmont el 28 de junio de 1953. Su elección fue justificada por sus «méritos» para el renacimiento de las costumbres cultivadas». En 1956, Meissner se casó con la escritora Marianne Mertens en su segundo matrimonio.

A pesar de las críticas aisladas por su pasado como diplomático nazi, Meissner fue honrado con numerosos honores en la Alemania de la posguerra. En 1986 fue galardonado con la Gran Cruz de Servicio Federal a sugerencia de Franz Josef Strauss. En este contexto, surgió una controversia debido a su participación en la reunión de Krummhübler, Meissner desmintió su asistencia a dicha reunión.

Otro siniestro personaje fue Otto Rolf Skorzeny, ingeniero y coronel austriaco de las Waffen-SS, que estuvo al mando de la unidad Friedentahler, fue especialista en operaciones especiales durante la Segunda Guerra Mundial.

Experto en acciones de espionaje y sabotaje, fue apodado por la inteligencia militar de los estadounidenses como «Caracortada» debido a las enormes cicatrices que recorrían sus mejillas. Igualmente, se hizo famoso por rescatar al dictador italiano Benito Mussolini, así como por llevar a cabo la Operación Greif que le valió el título de «El hombre más peligroso de Europa» por los Aliados.

Otro tema interesante indica que fue uno de los principales organizadores de ODESSA en España, tras escapar, gracias a la ayuda de un grupo de antiguos oficiales de las SS, rumbo a España el 27 de julio de 1948. Skorzeny se estableció inicialmente en Madrid, trabajando de ingeniero representando a prosperas compañías acereras alemanas que extraían el famoso Wolframio gallego, entre otros territorios de España.

Aunque el régimen de Franco siempre lo negó, tuvo el beneplácito del franquismo y gozaría de gran prestigio y popularidad debido a sus hazañas en la guerra. Por supuesto, la inteligencia militar de Estados Unidos estaban tras la pista ya que había evidentes sospechas de que ayudaba a presuntos criminales de guerra a escapar a Málaga, Cadiz y Alicante a través de la organización ODESSA, una organización creada por antiguos miembros de las SS, entre ellos su amigo Joaquim Von Knobloch, que residía en Conil de la Frontera que le puso en contacto con otro personaje de la Segunda Guerra Mundial, Junio Valerio Borghese, ambos puedes leerlo en estos enlaces su vida y negra obra.

Skorzeny tenia importantes contactos y relaciones sociales con importantes políticos españoles de toda clase de ideología política dentro del territorio español como este documento donde la CIA indica que este personaje se entrevistó con el mismísimo Don Juan de Borbon así como con el general Franco en su residencia en diciembre de 1950.

Igualmente, según informó el socialista ¿Teodorimo Menendez?, hubo una reunión del generalisisimo Franco y Don Juan de Borbon en Jerez de la Frontera donde se desconoce de que hablaron, ¿La sucesión de Don Juan en su hijo Juan Carlos? según se indica en documentos secretos de la inteligencia militar de Estados Unidos.

De todas formas, por culpa de ODESSA tuvo que irse a Argentina donde publicaría un condensado de dos tomos de sus memorias (Vive peligrosamente y Luchamos y perdimos), titulado Misiones secretas en 1954.

Su autobiografía fue un best seller, siendo tomada como lectura obligatoria por fuerzas armadas de países tan distantes con Skorzeny como Estados Unidos o incluso Israel. Principalmente porque había salido «limpio» de las acusaciones a las que fue sometido por los aliados, así como el extraordinario coraje militar que demostró en diferentes batallas, hicieron de él una especie de héroe de comandos.

También, resulta curioso que su imagen no fuera manchada cuando en 1954 se casaría con Ilse Lüthje, sobrina de Hjalmar Schacht, ministro de finanzas de Hitler. Gracia a sus innumerables contactos y a la protección política de importantes personajes españoles e incluso de servicios de inteligencia tan dispares como el MOSSAD israelí que obtuvo sus servicios tras evitar que Egipto tuviera armas nucleares hacían que estos servicios de inteligencia pusieran un tupido velo en sus actos como ayudar al agente nazi Gerhard Hartmut von Schubert a establecer la agencia de seguridad Paladin en España.​

Así pues, cuando las aguas se volvieron tranquilas Otto Skorzeny vivió sus últimos años en la localidad de Alcudia, en las islas Baleares, muriendo a causa de un cáncer de pulmón, puesto que nunca dejaría el tabaco y ser un fumador empedernido, durante un viaje de «negocios» en Madrid, el 7 de julio de 1975, a los 67 años.

Desgraciadamente, nunca se arrepentiría por sus supuestos crímenes siempre seria un nacionalsocialista convencido hasta el mismo día de su muerte e incluso, cuando su cuerpo fue incinerado en Madrid y la urna con sus restos, fue llevada por Alemania hasta Austria haciendo lamentables etapas donde hubo actos conmemorativos por parte de neonazis de toda Europa. Sus restos fueron inhumados en el panteón de su familia en Viena, capital de Austria y ciudad donde, desgraciadamente, nacería.

En 2011 se subastó el archivo de Skorzeny, heredado por su esposa Ilse, que tras arruinarse lo legó a las personas que le ayudaron y se encargaron de los gastos de su asilo sin saberse nunca quienes fueron. En 2017, Blanco Corredoira ha sacado una novela Objetivo Skorzeny (fuente de este blog) donde Otto Skorzeny es el personaje principal de la novela.