LA COMUNIDAD SEFARDÍ DE MÉXICO

Breve historia cronológica de la comunidad sefardí de México (sefaradí, como se dice en la antigua Nueva España)


 

La historia del sefardismo mexicano no es ninguna anécdota, sino que es tan amplia , profunda y digna de ser recordada que suele estar dividida en períodos para poder abarcarla, estudiarla y hasta aplaudirla. De momento, vamos a periodizarla.

Virreinato de Nueva España

El primero de los  períodos de la historia de los sefardíes en Nueva España  sería el de la época de la expulsión, con un no pequeño contingente de cripto-judíos eludiendo a la Inquisción en las naos de Colón y sus cuatro viajes.

El segundo período, que llega hasta 1519, es el de los viajes del comendador Nicolás de Ovando, para preparar la expedición de Hernán Cortés a tierra firme; en este período hubo restricciones de limpieza de sangre, que en 1511 se obviaron por la necesidad urgente de hombres: la  única condición par poder alistarse en esta empresa era comprometerse a  que,  acabada la obra regresaran a Europa. Pero en realidad hubo un tráfico ilegal de falsificaciones, compras fraudulentas de licencias, matrimonios apresurados  etc. y no regresó ninguno.

El tercer período, que alcanza hasta 1570, termina con el establecimiento del Tribunal del Sto Oficio en las colonias españolas. El momento en el que empieza la historia de los cristianos nuevos en México. La época del proceso inquisitorial contra Hernando Alonso, lugarteniente de Cortés, denunciado por un converso metido a dominico, fray Vicente de Sta. María. ¿Motivo? Le dijo a su esposa que no acudiera a la iglesia en el período menstrual. Acabó confesando bajo tortura su cripto-judaísmo y ardió en la hoguera en 1528. Y como él, muchos otros -los hermanos Morales, por ejemplo. Lo sabemos todo por las revelaciones del tabernero Francisco Millán, que en 1536, gran delator de quien compraba vino para el Shabat. Se supo así que los cripto-judíos se aglutinaban en Taxco, Zacualpán, Zumpango del río, Espíritu Santo y Talpujahua, así como luego en Zacatecas y más tarde en Guanajuato.

El cuarto período  llega hasta 1625. Es el momento de la llegada de los comerciantes portugueses. (Felipe II conquista Portugal en 1580)  La época de las detenciones y procesos de los Carvajal. Almirante de la armada de Felipe II, escoltó al virrey de México y batió y venció a los piratas británicos para defenderlo, por lo que se le recompensó con la alcaldía del puerto de Tampico. Luego se le nombraría gobernador de todo lo que conquistara. Y convenció a toda su familia cripto-judía no ir a Italia para volver al judaísmo sino ir a México. Fundó el reino de Nueva León pero tuvo disputas con el nuevo virrey, aunque obtuvo licencia para repoblar el territorio con 200 familias conversas, entre las que había muchas que eran cripto-judías. Por eso fue denunciado a la Inquisición y murió por ella en 1590 junto con sus familiares. Mientras tanto, lo portugueses cripto-judíos fundaron comunidades en México, Guadalajara, Puebla, Querétaro, Pachuca, Oaxaca, Veracruz, Michoacán, Tazco y Zapatecas. Fueron prósperos comerciantes que se casaron con cristianos viejos y formaban la alta burguesía mexicana. No obstante sufrieron autos de fe y persecuciones, unos 115.

De este período hay que hacer mención del caso de los indios judíos -unos 3000 en 1917, repartidos primordialmente entre México y  Venta Prieta (estado de Hidalgo) y unificados en la comunidad Beit Elohim, presidida por Baltasar Loreano Ramirez. Según él, cien cripto-judíos acompañaron a carvajal en su empresa de fundar Nuevo León. El primer alcalde de S Luis, esto es Monterrey, Diego Montemayor, según Ramírez, era judío de pura cepa. De esta presencia cripto-judía nace la conversión de muchos indios al judaísmo. En los últimos años han sido reconocidos como judíos que conservan siglos de vida comunitaria judía y algunos pequeños grupos de ellos incluso hicieron aliá en los años ´80 del siglo anterior.

Sefardíes de Nuevo México

El quinto período  llega hasta finales del S XVII. La prosperidad cripto-judaica era paralela la persecución inquisitorial: notable.  200 procesos en 30 años.  Y entre 1672 y 1676, cien. Había un auto de fe por año. En el de 1649 procesaron a 198, de los cuales 13 ardieron en la hoguera. Uno de ellos, Tomás Tribiño de Sobremonte(lo cuenta el rabino de Amsterdam, Menashe Ben Israel en «Esperanza de Israel»)

Fundación del colegio de la comunidad de Monte Sinaí

El sexto período llega a 1821, con la independencia de México. Las comunidades más relevantes están en Veracruz, México, Guadalajara,  Puebla, Acapulco y ciertas localidades del Yucatán. Descienden los procesos inquisitoriales pero la asimilación es también la causa de que desciendan las comunidades.

El séptimo y último período de la historia de los sefardíes de México es el contemporáneo. A finales del S XIX se asentaron en el país un par de centenares de familias judías del Imperio Otomano, bien de Turquía, bien Bulgaria -todos ladinoparlantes- o bien de Siria, que no eran ladinoparlantes. Para la comunidad askenazí eran indeseables, pobres, y los llamaban despectivamente «baisanos». Eran ricos en el conocimiento y práctica del judaísmo y la kashrut  y en una alegre fuerza de auto-reconstrucción en un país donde las cosas no eran fáciles para empezar desde cero.

De esta época, concretamente de 1889, data la edición de un periódico netamente judío llamado El Sábado Secreto, del judío sefardí Francisco Rivas, que luego se llamó «La Luz del Sábado». Rivas será quien se encargue de reagrupar a las comunidades de indios judíos.

Para 1912, gracias a Aarón Capón, se crea la primera comunidad , Alianza Monte Sinaí; al año siguiente ya tenían cementerio. En 1916 ya había en México cuatro sinagogas y reconocimiento legal del gobierno. Luego vino el cruento tiempo de la revolución, que se cobró muchas vidas sefardíes, pero por esa época hay un fuerte movimiento migratorio desde el Imperio Otomano, por la Primera Guerra Mundial y las Guerras Balcánicas. En 1924, sefardíes de Marruecos, Turquía, Grecia,  fundan «la Fraternidad», que aún sigue en pie. Ese año la comunidad adopta formalmente el nombre de Kahal Kadosh Rabí Yehudá Ha´Leví. Luego, en 1938, los judíos de Jalab (Alepo) se separan de Monte Sinaí y crean «Tsdaká Ve´Marpé», que hacia 1978 contaba con 1300 familias, además de un colegio propio y todos los servicios requeridos para la vida judía plena.

Se calcula haya unos 70.000 judíos en México, de los cuales 50.000 serían sefardíes.