LA PRIMERA MUJER EN GANAR UNA CARRERA DE COCHES

Reseña histórica de Mrs. Levitt, sefardí londinense que, en 1903, se convirtió en pionera del automovilismo ganando una carrera.


Elizabeth Levy -antes de pasar a ser Dorothy Levitt- nació el 5 de enero de 1882 en Hackney, London -Stamford Hill es incluso hoy el mayor  asentamiento jasídico de Europa. Su padre, Jacob Levi, era joyero y comerciaba con té, y su madre Julia Raphael, del distrito de Aldgate -la Vieja Judería- donde se erigió en el S XVIII la que hoy es la más antigua sinagoga de Londres, la de Bevis Marks.

Se sabe poco de la juventud de Mrs. Levitt -tenía otras dos hermanas y era una experta amazona y trabajaba como secretaria para una empresa  de ingienería, Napier, que desde 1899 estaba manufacturando automóviles en la incipiente industria del mundo del motor. Especialmente para Selwyn Edge,su piloto de cabecera, australiano con participación en carreras como Londres-Viena. Fue él quien se fijó en Dorothy Levvitt -que era espectacular- para proponerla como modelo de mujer capaz de conducir un automóvil (y además comprarlo) Por ese entonces -1902- sus padres tenían previsto retirarse al campo y antes de ello decidieron buscar un marido solvente y bueno para su hija; pero la secretaria, que no quería casarse con el elegido, lloró a  Edge que fue quien le dijo que ella no necesitaba casarse con nadie sino hacer una carrera por sí misma. Dicen que se hicieron amantes. Así que se la llevó a París  seis meses para enseñarle a conducir un automóvil y saber toda su mecánica.

En abril de 1903 tuvo lugar su primera participación en una carrera, en la escudería Gladiator, de la cual era agente Edge. En mayo pilotó un 16 CV en la carrera de las cuatrocientas millas entre Glasgow y Londres, que pudo haber ganado si no hubiera sido porque tuvo que detenerse a arreglar un problema con los neumáticos. Y luego vendría la  Southport Speed ​​Trials, donde ganó con su Gladiator de 450 libras esterlinas. En un momento en que sólo la más abierta aristocracia podía permitirse lujos como un automóvil, la mayoría de la población inglesa estaba estupefecta ante el hecho de que una mujer pudiera no sólo conducir un artefacto tan peligroso sino además competir entre hombres y ganar. En la carrera París Madrid de 1903 corrió una mujer, pero ataviada como hombre, y sólo se supo que era mujer cuando llegó a Madrid y habló. Pero Dorothy Leavit no se vestía de hombre, sino que escogía los atuendos más femeninos -pamelas y pañuelos- para lucirse a bordo de su Gladiator. Por si fuera poco vivía sola en un apartamento en el West End, atendida por dos sirvientes, decían los tabloides.

Le gustaba la velocidad -suponemos que la había conocido galopando con sus caballos de jovencita. El 6 de noviembre de 1903, fue convocada para presentarse en the  Marlborough Street Assizes por estar acusada de exceso de velocidad en Hyde Park. Según la declaración de la policía, se dice que condujo a «un ritmo terrible» y, cuando se detuvo, según los informes, se declaraba  que «[ a ella] … le gustaría atropellar a todos los policías y desearía haber atropellado al sargento para que muriera «. Aunque ella no compareció personalmente, el magistrado, el Sr. Denman, le impuso una multa de £ 5 .  Los otros seis acusados ​​de automovilismo ese día solo recibieron una multa de £ 2 más los costos.

Tras una enfermedad que la llevó a pasar una convalecencia en Madeira, regresó a los automóviles en 1904. En octubre ganó dos medallas en Southport Speed ​​Trials (Blackpool) con un Napier de 50 caballos de fuerza.  En The Times no obstante interesaba más decir que le encantaba pescar truchas y jugar al póker y la ruleta y que su más próximo desafío sería romper la banca en el Casino de Montecarlo sin soltar a su perro Dodo, un pomeramia que había entrado ilegalmente en el Reino Unido escondido en el capó de un auto.

El perro era un regalo de una socialité de su época, ya que Mrs Leavitt circundaba las altas esferas del mundo inglés antes de la Primera Guerra Mundial.

Además también pilotaba lanchas a motor: ganó el trofeo  británico International Harmsworth Trophy para lanchas a motor, derrotando a la entrada francesa Trefle-A-Quatre. El evento fue presidido por el Automóvil Club de Gran Bretaña e Irlanda y el Royal Victoria Yacht Club y tuvo lugar en el Royal Cork Yacht Club en Cork Harbour,  Irlanda. Encantada con el mundo del motor decidió aprender a volar aviones.

Por otra parte, escribía una columna en un periódico -sobre automóviles- y hasta un libro sobre sus experiencias al volante; cuando todavía no se había inventado el espejo retrovisor ella ya hablaba de usar el espejo de la polvera.

Pero a partir de 1922 desaparece de la vida pública -nadie sabe por qué.  Fue encontrada muerta en su cama, en el número 50 de Upper Baker Street , Marylebone , el 17 de mayo de 1922 . Sobredosis de morfina, con una afección cardíaca y enferma de sarampión, dictaminó la autopsia. La beneficiaria de su patrimonio fue su hermana Elsie.