LOS JUDÍOS DE DJERBA

Al sur de Túnez, cerrando la entrada al golfo de Boughrara, está la isla de Djerba, paraíso vacacional de lujo en azul mediterráneo con raíces históricas muy lejanas: está identificada como la Isla de los Lotófagos, donde naufraga Ulises, el de La Odisea de Homero; Flaubert, en Salambó, la describe como cubierta de oro, donde los limoneros son tan altos como los cedros y con un aire tan dulce que empacha hasta morir.

Antes de la fundación de Cartago, ya hubo en esta isla mercaderes fenicios de Tiro, con lo cual es muy probable que,  para entonces llegaran,   los primeros judíos al lugar ; no obstante, la tradición oral señala este hecho como en tiempos del acoso de Nabucondonosor sobre Jerusalén,  S IV AEC.

También cuenta esa tradición  ni más ni menos que  una de las puertas del Templo de Salomón habría sido llevada hasta la sinagoga de   LA GHRIBA, su más famoso lugar de rezo hebreo en la isla. La población más importante de Djerba está en  Hara Sghira, pero anteriormente este lugar se llamaba Dighet, que algunos filólogos dicen que es corrupción lingüística de Delet, el término hebreo para Puerta.

la Ghriba

Pruebas de presencia judía en Djerba sólo se conocen desde la Edad Media, aunque algunas costumbres de Pesaj y algunas lecturas de las Haftarot en ciertos Shabatot especiales hacen pensar  que su rito proviene desde muy lejos, de la época de los Macabeos, en el S II AEC, esto es, anteriores a la unificación ritual del Talmud, tal cual el caso de los  judíos yemenitas o los etíopes, pre-talmúdicos.

Como queda dicho, es en el S XI, por un carta que se encontró en la Guenizá de la Sinagoga de ben Ezra en  El Cairo donde aparece la más antigua prueba documental de una comunidad judía en Djerba. A través de comparar con otras cartas, se deduce que el comercio internacional , sobre todo de lino, era una labor importante para los judíos medievales de esta isla. También hay una carta de 1136 que habla de un barco venido desde Alejandría  en el que son repatriados muchos cautivos, siendo uno de ellos el hijo del jasán, Rabí Sedaka (tsdaká)

HA´RAMBÁM también habla de los judíos de Djerba pero para referirse a lo que él denomina la abominación de los karaítas -los judíos que no reconocen la autoridad de El Talmud. El rabino y juez rabínico de Argel, Salomón DURÁN, que vivió a caballo de los ss. XIII y XIV, en una ocasión dirimió un divorcio en el cual uno de los cónyuges era natural de Djerba.

La pirámide de cráneos de Djerba. E. Benjamin. 1841.

En mayo de 1560 se libró la Batalla de Djerba, que enfrentó al Imperio Otomano con una confederación de españoles, napolitanos, sicilianos y miembros de la Orden de S Juan del Hospital. La Batalla de Los Gelves, que así se llama en español, pues Djerba mira al golfo de Galves, fue un gran triunfo para los otomanos, que capturaron la mitad de las naos cristianas. Mil calaveras de los presos fueron amontonadas en un monumento que se ordenó destruir a mediados del S XIX. Otra desgracia para los judíos de la isla fue el que para esta época el comercio entre América y Europa hace declinar sus negocios, mientras tienen que seguir pagando el impuesto especial que asegura su defensa en tanto que dhimis, no musulmanes en un país de mayoría musulmana. Y vestir de manera identificatoria. Medidas que estuvieron en vigor hasta 1857.

A mediados del s XVIII, hubo cierto resurgimiento religioso de la mano de r. Aharón Peretz, que pasó a la historia del mundo rabínico por ser quien realizó una serie de ordenanzas (takanot) que modernizaron la judería de Djerba desde muchos puntos de vista, como puede ser el de lo que desde entonces ya no era kasher.

No obstante, a pesar de la presión capitalina, la comunidad de Djerba rechaza la instauración del sistema educativo de l´Alliance Israelite Universelle, cuyo propósitos incluso entendieron como ofensivos para la comunidad. En  otros muchos lugares hubo reticencias también , aunque acabaron cediendo. En Djerba la decisión fue inamovible. Aun a pesar de que se les adjudicara el  calificativo prejuicio de «atrasados.»

Sin embargo, a principios de S XX,  las imprentas de Djerba habían sacado a la luz 600 títulos para una población que nunca superó los 4.500 habitantes, pudiendo desde 1903 prescindir de las imprentas de Livorno o de Jerusalén. La edad de oro de la imprenta judía en Djerba son los años ´30, cuando en Centro Europa es ya patente la hoguera nazi de libros, mientras en Djerba publican tanto a autores de la antigüedad como de la edad contemporánea. Había cinco imprentas para tan pequeña comunidad. Dos de ellas todavía imprimían en hebreo a principios de los años ´80 del S XX, pues los judíos de Djerba, los que rechazaron ser educados en francés, hablan hebreo fluidamente. Pero eran atrasados a los ojos de aquellos que no son tan cultos como para saber respetar.

Sinagoga de los Cohanim de Djirt

Aunque la comunidad pervive en el S XXI,   en la década de los años ´50, tras la  re-institución del estado israelí, hubo un importante movimiento migratorio hacia Israel y Francia , pues además de  la situación económica, la existencia del estado de Israel conllevó un gran deterioro de  las relaciones entre judíos y musulmanes extremistas  en Djerba.  Hubo tres grandes olas de partida:  la primera,  después de la independencia de Israel en 1948;  la segunda,  en 1968-1969  a causa de los efectos combinados del experimento colectivista realizado bajo el presidente Habib Bourguiba por la Guerra de los Seis Días; y una  tercera ola que tuvo lugar en la década de 1980,  debido al creciente deterioro de las relaciones entre judíos y elextremismo del Islama yihadista.

En 1985, un soldado tunecino, responsable de mantener el orden,  abrió fuego en el recinto de la sinagoga de la  Ghriba , asesinando  a cinco personas, incluidos cuatro judíos. En el mismo edificio,  en 2002, un franco-tunecino de 25 años vinculado a la red terrorista Al-Qaeda , al volante de un camión cisterna,  perpetró  un ataque terrorista  que se llevó por delante la  vida de 21 víctimas.

En Djerba llegó a haber veinte sinagogas, una para cada cien fieles, y en 1980 aún permanecían en activo 17. En  Hara Sghira, hay cinco sinagogas  que en realidad son yeshivot ,  solo la de La Ghriba tiene el honor de ser llamada sinagoga propiamente hablando .

Patio de la Griba, donde se reúnen los peregrinos en L´Ag Ba´Omer.