¿QUÉ ES «SEUDAT YITRÓ»?

 Una fiesta esencialmente infantil celebrada por los judíos tunecinos, tanto en la diáspora, como en Israel.


Excepto Yom Kipur y los distintos ayunos anuales, las fiestas judías se celebran entorno a la comida, empezando por las tres colaciones preceptivas de Shabat   (Talmud, Shabbat 118b) Esas comidas, al ser festivas, se denominan «banquetes». En hebreo, seudá, seudot, סעודה.

Pero además, hay una seudá particular, la Seudá de Yitró.

Yitró -el nombre del suegro de Moisés- denomina a una de las perícopas semanales (parashat ha´shavúa)  de la lectura anual de La Torá: la Parashá de Yitró, ( Exodo 18:1-20:23)

¿Tan importante y singular es esta parashá que merece festejarse con un banquete?

La «Fiesta de los Hijos» , Jag Ha´baním -en oposición a la de las chicas, que se celebra en Rosh Jodesh Tevet-  se celebra los jueves de la semana que se lee la Parashá de Yitró . (Jueves porque además del Shabat, lunes y jueves eran días de lectura de parashá porque eran los días de mercado en la Edad Media y venían judíos de lejos a las sinagogas.)

Veamos el origen de la fiesta:

A principios del S. XIX, Túnez se vio asolada por una epidemia de ictericia, traspasando sus fronteras hacia Argelia. Los niños pequeños corrían un gran peligro, pues la tasa de mortandad infantil ya era alta de por sí.

El rabino Yitzjak Jai Taïeb Lo Met (1743-1837) tuvo una idea para contrarrestar la pandemia:  pidió que los niños bebieran caldos de pichón -la cría de una paloma-  y colocaran una paloma viva sobre  el vientre de los niños enfermos. Así,  la ictericia fue transmitida desde el hígado de los niños al de las palomas,  que murieron en el lugar de los niños.

La epidemia habría sido erradicada el día antes de Shabat Yitro. 

Desde entonces,  cada  año, como señal de reconocimiento, se  ha mantenido la costumbre de celebrar este milagro preparando una hermosa mesa para un banquete de agradecimiento, la seudat Yitró,    disfrutando de  sopas  y  asados de aves,  pasteles etc.  Hoy en día no se come paloma, están muy enfermas,  así que han sido reemplazadas por gallinas o pollo. 

No todos los judíos lo celebran, pues es una costumbre propia de Túnez y de Constantine,  en Argelia,  sobre todo; los de  Tlemcen la llaman Jag  Siúm, que parece recordar a la palabra «fin» en hebreo pero es un acrónimo de Seduat Yitro ve´ Moshé  Se celebra, hoy,  en Israel o en París o en Nueva York lugares de alta densidad de población judeo-tunecina.  En Israel se realizan también seudot Ytró comunitarios, como motivo para una encuentro general de la judería tunecina celebrando con gastronomía tunecina, cantando piutím, y recibiendo bendiciones de rabinos tunecinos.

Aunque el origen del fin de la epidemia sea el motivo de la fiesta, además hay otros dos: en la parashá Yetró,  éste ofrece un banquete a Moshé Rabenu y a los setenta sabios, y a la vez , como la parashá de Ytró es el momento en que se narra el episodio de los 10 Mandamientos, en esta fecha se hace leerlos a los niños por primera vez  en público, como un primer paso de la posterior bar mitzva.  Por eso en  la isla de Djerba se llama jag Jinuj la ´naar, La fiesta de la educación de los jóvenes.

Algunas sinagogas tunecinas, en especial en Djerba, al día siguiente – según el calendario civil- omiten Tajanún, pues en realidad están en el mismo día según el calendario hebreo, ya que la seud es una cena.

Sobre las mesas, como premio, pasteles tunecinos como el famoso yoyo o  Makroud, o piruletas como estas: