Parahá: Shoftim, שֹׁפְטִים, Jueces. Deuteronomio 16:18–21:9, Haftará: 4ª de consolación , Isaías 51:12–52:12. Darshán: Morenu Verabenu, Ribí David Jananiá Pinto, shlita
Indefectiblemente pondrás
sobre ti un rey (Devarim 17:15).
El propósito principal del hombre en el mundo es coronar a Hakadosh Baruj Hu por Rey sobre sí, y aceptar el yugo de Su reinado, cumpliendo con todos Sus decretos y preceptos. Esta es también la significación del mes de elul: aceptar el yugo Celestial sobre nosotros y coronar por Rey a Hakadosh Baruj Hu.
Para despertar los corazones en este respecto, las congregaciones de Israel de todo el mundo acostumbraron sonar el shofar ya desde el comienzo del mes de elul, como escribió el Rambam, zal (Hiljot Teshuvá, 3:4). El toque del shofar viene a despertar los corazones de Israel a hacer teshuvá, en condición de “despertad, somnolientos, de vuestro letargo”. Si la persona estuvo sumida en el letargo a lo
largo del año, viene Hakadosh Baruj Hu en el mes de elul y se dirige a cada judío y le dice: “¡Despierta! ¡Acércate a Mí y búscame, porque Yo estoy bien cercano a ti. Procura rectificar tu sendero y acepta sobre ti Mi soberanía. Si así lo hicieres, he de recordarte para bien y te inscribiré para buena vida y para paz”.
Pero si uno permaneciere indiferente respecto de su condición y no despertare pararetornar en teshuvá y aceptar a Hashem como su Dios, ni aprovechare Su cercanía a él, y continuare con su rutina diaria, entonces, estaría demostrando menosprecio hacia el Rey, y nadie podría garantizar su continuación en estemundo —Rajmaná litzlán—. Éste es el mensaje que Hashemle transmite a cada judío en estos días del mes de elul.
Y, ciertamente, ¿cómo podría el hombre permanecer indiferente, sin despertar en teshuvá, cuando sabe que enunos cuantos días más estará de pie delante de Hashemen Juicio, en el día de Rosh Hashaná, para rendir cuentaspor todos sus actos? ¿Cómo podría no temer en el corazónpor el Juicio sin tener de su lado a un abogado defensorque lo proteja? Si David Hamélej, alav Hashalom, que fue un hombre sagrado y puro, limpio de todo pecado o transgresión, tuvo miedo del Día del Juicio, y dijo (Tehilim
119:120):
“Se estremece por temor de Ti mi carne; y de Tus
juicios, tengo miedo”,
nosotros, que somos como el musgo sobre la pared, y que tenemos numerosos pecados colgando de nuestro cuello, con mucha más razón, debemos temer del Juicio. Y, sin duda alguna, tenemos la obligación deprepararnos como es debido para el Juicio y procurarnos abogados defensores buenos —nuestros méritos—, los cuales estarán a nuestro lado en la hora de angustia.
Hace unos cuantos días, cuando recibía al público, llegó a verme una señora. Al verla, pude percibir que la embargaba un gran temor, y hastatemblaba. Temí por su bienestar yle pregunté qué le sucedía. La mujer comenzó a llorar amargamente, y me dijo: “Los médicos sospechan que tengo la maldita enfermedad, y me ordenaron hacer varios exámenes urgentes. Ahora me encuentro a la espera de los resultados, y estoy sin aliento a causa del miedo. Me asusta el solo hecho de pensar en la posibilidad de la muerte. Así que vine a pedirle al Rav que me bendiga para que todo esté bien”. Obviamente, la bendije de todo corazón, y la calmé, hablándole al corazón y reforzando su fe. Pero, en aquellos instantes, pensé y me dije a mí mismo: “Esta mujer se hizo ‘exámenes’ y está a la espera de los ‘resultados’; por eso, está
temblando de miedo, con gran temor y angustia. Nosotros, en unos cuantos días, en Rosh Hashaná, estaremos de pie en Juicio delante de Hashem, Quien también nos va a hacer ‘exámenes’ —es decir, va a examinar nuestros actos, si han sido buenos o no—, y también vamos a estar a laespera de los ‘resultados’ para ver cuál va a ser nuestroveredicto. ¿Cómo podremos no temer ni temblar de miedo de los resultados del Juicio como aquella mujer? ¿Cómo podremos permanecer indiferentes y no preparar unos “abogados” para nosotros mismos como es debido? ¡Está en nuestras manos mejorar nuestra condición en el Juicio! Y tenemos la posibilidad de mitigar el veredicto, y emitir un veredicto favorable por medio del arrepentimiento, la plegaria y la tzedaká. ¡Estos tres factores hacen que el veredicto sea favorable!”.
Estas reflexiones fueron las que me surgieron a raíz de aquella mujer y de su gran temor por el peligro en el que se encontraba. Cuánto quisiera que este despertar que tuve dentro de mí actúe en mérito de aquella mujer y tenga salud completa. Y, en verdad, quién no temería al contemplar las angustias que nos han afligido durante el año. Cuántas personas, que antes estaban con nosotros, ya nos han dejado.
Todo fue decretado en Rosh Hashaná, pues en este día Hakadosh Baruj Hu decide quién vive y quién no, quién enriquece y quien empobrece, quién estará tranquilo y quién estará afligido con sufrimientos —Rajmaná litzlán—, como decimos en la plegaria de Rosh Hashaná. Obviamente, lo principal en la preparación es que el hombre se refuerce en el estudio de la Torá. Cadahombre debe tomar la resolución de fijar momentos de estudio a diario. Y todo aquel que tenga en las manos esta resolución, tiene el mejor de los “abogados” para el Día del Juicio, porque “la Torá se equipara a todas [las demás mitzvot]”.