Crece la oposición a que en la Sierra de los Judios de Priego, Córdoba, se abran unas canteras de indudable impacto ecológico en un lugar de patrimonio cultural.
En la Ruta del Califato y en las estribaciones de Sierra Morena, al sudeste de la provincia de Córdoba, se extiende al sol entre olivares y encinas, el partido judicial de Priego -8 aldeas. Priego fue reconquistada por Fernando III y dada a la Orden de Calatrava, primero, y al Gran Capitán Gonzalo Fdz. de Córdoba, después. En el S XVII, la ciudad del agua, así llamada por sus muchos manantiales, decidió empezar a repartir tierras comunales entre los hijos de los arrendatarios; y a la vera de esos manantiales fueron realizando construcciones que con el tiempo serían aldeas. En el Diccionario Geográfico Estadístico Histórico de España, de Pascual Madoz, a mediados del siglo XIX, aparece una aldea prieguense denominada Cortijos del Judío, situada entre varios cerros poblados de viñas y olivos, a la izquierda del camino que va de Priego a Almedinilla. Esta aldea hoy se llama La Concepción. Y la sierra que hay a sus espaldas es la Sierra de los Judíos. Algunos la llaman Sierra del Palenque.
Antonio Lozano y Valenzuela , capellán hacia el año 1793, escribía de la Sierra del Judío: «legua y cuarto de larga y tres cuartos de legua de ancha. Para subirla se necesita media hora. Dista de este pueblo (Priego) más de media legua. Tiene un puerto llamado la Torre de las Cabras».
Parece ser que el Cortijo de los Judíos era asentamiento producido por la diseminación de la cercana judería de Lucena, perla de Sfarad. Y la Sierra en sí, conocida por haber sido asentamiento donde se encontraron restos del Paleolítico Superior , donde quedan dos cuevas, la Murcielaguina y la de Los Mármoles. En esta cueva se han empezado a trramitar licencias para la apertura de un cantera, lo cual ha levantado la voz airada de asociaciones ecologistas porque pondría en peligro la superviviencia de especies de orquídeas silvestres, así como de una agresión contra linces y jinetas, cernícalos y águilas perdiceras.
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