Meknès, en Marruecos -a mitad de camino de esa línea imaginaria que va de Casablanca a Fez – fue denominada la Jerusalén de Marruecos, por su alto grado de estudio de La Torá, y el Pequeño París, por su monumental belleza.
Y en esta ciudad se asentaron , tras el Decreto de Expulsión, los hispano-judíos que en Marruecos denominaron «megurashím» (en hebreo, los expulsos) , como los Toledano y los Berdugo.
Y en ese contexto es donde aparece, desde Castilla, la conocida dinastía de los Berdugo (que al parecer escriben su nombre con /B/ y no con /V/ porque en origen el apellido era una patronímico francés , de los expulsados de Francia, luego castellanizado. Además hay una rama cristiana, con origen en Avila, pero con casa solariega en Aranda de Duero: el palacio de los Berdugo.
Los orígenes conocidos nos llevan a cuando r. Javiv Toledano, de Salónica, se instaló en Meknés (Mequinez en español) donde fue presidente de la corte hebrea de justicia, av beit din. Su hija se casó con Abraham Berdugo y fueron padres de Moshé Berdugo., apodado Ha´Mashbir . Este, en 1722, con la muerte de su tío, Moshé Toledano, le sucedió en el puesto del Beit Din, además de presidir la más grande de las yeshivot de la localidad. Murió en 1730 y está enterrado en el antiguo cementerio judío de Meknés, que se puede aún visitar.
Ha´mashbir concibió cuatro hijas y un hijo. Y el hijo murió joven. La primogénita, Beleida, casó con un pariente – no sabemos en qué grado- Mordejai Berdugo, apodado Ha´marbitz, trayendo al mundo a dos grandes rabinos, Yekutiel y Raphael Berdugo.
Yekutiel , a quien llamaron así por honor a su abuelo, nació en el invierno de 1731. Se casó a los 16 años con Freja Ben David y poco después sucedió a su padre en la dirección de la sinagoga, no sin haber tenido opositores a ello. Su mujer falleció en 1782, después de haberle dado muchos hijos: rabí Yosef, rabí Ptitiá, rabí Yitzjak, además de un niño que murió de muy pequeño y una niña que nació muerta. Otra de las hijas, Esther, se casó con su primo Mordejai Berdugo, hijo de Rafael, de quien hablaremos después. Rabí Yekutiel se casó en seegundas nupcias con Luna, con quien tuvo dos hijos más, y los dos rabinos: rabí Yehudá y rabí Saadia. Dicen que si bien durante su primer matrimonio vivió en la pobreza, en el segundo vivió en la riqueza. Pero enviudó en 1798. Entonces rehizo su vida casándose con Lea. Pero en medio de la oración de Neilá del Kipur de 1801, en la sinagoga, rabí Yekutiel Berdugo murió. A los dos meses, Luna dio a luz a un hijo , al que llamó Yeoshúa. Toda su obra , takanot y demás, fue recopilada de forma antológica bajo el nombre de Torat Yekutiel.
Su hermano, Rafael, que era más joven -nació en 1747- fue tan grande en su jojmá que fue apodado el Angel Rafael. Sólo tenía quince años cuando murió su padre , pero ya para aquella época había conseguido aprender tanto de él que se convirtió en una autoridad de La Torá y el Talmud a pesar de que no tenía ni para comprar verlas con las que estudiar por las noches. Luego, cumplidos los treinta, junto su hermano Yekutiel y rabí Toledano, se dedicó al Beit Din. Pero su papel preponderante, aun sucediendo a su hermano en la presidencia de la corte rabínica, fue el de maestro de Halajá para toda su generación (sin olvidar su papel de líder de la comunidad en tiempos de un regidor marroquí que fue muy cruel con los judíos) En su vida personal vivió penurias como enterrar a tres esposas, además de un hijo de sólo cinco años. Dejó tras de sí cuatro hijos: rabí Maimón, r. Mordejai, r. Abraham y r Meir , el cual fue asesinado junto a su esposa por un bereber. Maimón fue quien le sucedió, aunque por poco tiempo porque murió bastante joven. Murió en la noche de Hosana Rabá de 1822 estudiando el Zohar a la edad de 75 años. Fue enterrado en féretro y al año lo tuvieron que abrir por decreto real: su cuerpo estaba incorrupto.
Rafael fue el padre de Mordejai, que a su vez fue el padre de r Yehoshúa , nacido en el año de 1878. En 1931 ya fue presidente del Beit Din de Meknès y , en 1940, lo fue del de Rabat, convirtiéndose también en el rabino principal de Marruecos, en sustitución de su pariente r Jaím Yekutiel Berdugo, a quien no quiso sustituir en vida.
Fue un gran emprendedor de actividades caritativas y sionistas: por ejemplo, recolectar y administrar dinero con el que construir muchas instituciones y casas para la comunidad de megurashím en Israel. Su obra, jamás publicad en vida, escrita hasta el año 1953, año de su fallecimiento, no fue publicada sino en 2012 por su nieto, rav David Berdugo, dayán de Tel Aviv e hijo de uno de los dos hijos que tuvo con Bat Sheva. Uno de ellos, Rafael, fue el último rabino de Meknès-
