PARASHAT HA´SHAVÚA: «SHMINI»

Parashá: שְּׁמִינִי‎ , Shmini, Octavo. Levitico 9:1–11:47. haftará sefardit:  2 Samuel 6:1–19. Darshán:  Morenu veRabenu HaGaón HaTzadik Rabí David Janania Pinto shlita


“Le dijo Moshé a Aharón: ‘Eso
es lo que habló Hashem, diciendo:
«Con Mis allegados, Me santificaré; y delante de todo el pueblo, seré
glorificado» ’. Y Aharón permaneció callado” (Vaikrá 10:3).

Los hijos de Aharón Hacohén, Nadav y Avihú, murieron cuando ofrendaron un fuego extraño delante de Hashem, como describe el versículo:

“Y tomaron los hijos de Aharón, Nadav y Avihú, cada cual su sartén, y pusieron en ellas fuego, pusieron incienso sobre éste y ofrendaron delante de Hashem un fuego extraño que Él no les había ordenado” (Vaikrá10:1).

Siendo así, surge una dificultad: ¿por qué dijo Hashem, acerca de la muerte de Nadav y Avihú, “con los que se acercan a Mí, Me santificaré”, lo que da a entender que ellos estaban cercanos a Hashem?, ¡si ellos
murieron por su pecado de haber ofrendado un fuego extraño delante de Hashem! El Or Hajaím Hakadosh esclarece que el pecado de Nadav y Avihú consistió en el hecho de que el fuego que habían ofrendado fue uno que no se los había ordenado Hashem, de lo que se entiende que, con independencia de este único pecado, no tenían más transgresiones en su haber.

Lo que el Or Hajaím Hakadosh quiere decir es que el hombre que peca, con independencia de la acción que realiza en contra de la voluntad del Creador, transgrede también con el pecado del pensamiento. Hakadosh Baruj Hu le ordenó a la persona hacer una mitzvá,y si dicha persona, por pereza, desgano o porperseguir otros deseos, peca y no cumple conlo que se le ordenó, resulta que la persona fue en contra de la voluntad del Creador con el pensamiento, además de la acción mismacon la que transgredió.

Ciertamente, Nadav y Avihú pecaron con su acción por el hecho de que ofrendaron un fuego que Hashem no les había ordenado ofrendar; pero, de todas formas, el pensamiento que ellos tuvieron fue solo en Nombre del Cielo, porque, muy por el contrario, la intención de ellos era acercarse más y más a Hakadosh Baruj Hu, y sabían que el ofrecimiento de un fuego extraño lesprovocaría la muerte. De todas formas, ellos estaban dispuestos a morir a toda costa con tal de ofrendar un korbán a Hashem y estar más cerca de Él.Por ello, Hakadosh Baruj Hu dijo que Nadavy Avihú eran cercanos a Él, a pesar de que fallecieron por su pecado, pues, aquel pecadofue una santificación de Hashem, porque todo lo que ellos buscaban era acercarsey adherirse a su Creador más y más, hastaque llegaron a entregar su vida para lograrlo.

Toda persona del Pueblo de Israel tiene la obligación de entregar su vida en santificación del Nombre de Hashem, como Nadav y Avihú, solo que es posible también vivir en santificación de Hashem. Cuando la persona vence sus deseos, y resiste las pruebas grandes y difíciles que Hakadosh Baruj Hu le pone, demuestra de esa forma cuán grande es su amor y cercanía al Creador, y también sobre esa persona Hashem dice:  “Con los que se acercan a Mí, Me santificaré”, porque mientras más anula una persona sus deseos particulares e inclinaciones ante la voluntad del Creador, demuestra cuán cercano está de Hakadosh Baruj Hu, hasta llegar a ser, virtualmente, bien cercano.

Una vez, me encontré con un hombre que estaba vivenciando un momento de inspiración sagrada y me dijo que quería santificar el Nombre de Hashem, pero que no sabía qué tenía que hacer para lograr dicha
santificación. Le dije que la santificación de Hashem no tiene que ser en público, haciendo gran ruido alrededor, sino, más bien, aun cuando se encontrare en la habitación más oculta, en donde no hubiera nadie quien lo viera, y él lograra vencer su deseo particular y cumplir solo con la voluntad del Creador, de esa forma, estaría santificando el Nombre de Hashem y logrando su cercanía a Él. Sin embargo, aquel hombre quiso que lo ayudara a pensar en algo que él pudiera hacer; de modo que le pregunté si tenía un teléfono inteligente no casher en su bolsillo. Cuando me respondió afirmativamente, ledije que, si sacaba dicho teléfono de su bolsillo y lo rompía en mil pedazos, a pesar delalto precio de dicho aparato, y se compraba, en su lugar, un teléfono casher, de esa forma,estaría anulando su voluntad por completoante la voluntad del Creador, y recibiría la recompensa de uno que santifica a Hashem.Esto es así por cuanto todos sus amigos le preguntarían qué había sucedido con su teléfono celular y por qué había cambiado de número de teléfono. Al explicarles la razón, lograría una gran santificación del Nombre de Hashem. A este hombre le resultó muy, pero muy difícil cumplir con mi sugerencia y comenzó a excusar el uso de su teléfono para lograr su sustento, pero él se comprometió a no utilizarlo sino solo para lo estrictamente necesario en cuanto a su sustento, y a no incurrir en ninguna transgresión.

Le dije lo que escribió Rashí acerca del versículo en Divré Hayamim (33:15): “Y se deshizo de los dioses extraños y el símbolo de la Casa de Hashem, y todos los altares que había construido en el Monte del Templo de Hashem en Jerusalem, y los envió fuera de la ciudad”. Es decir, el rey Menashé, después de haber pecado y haber hecho pecar a todo Israel con idolatría, hizo teshuvá, pero en lugar de reventar las idolatrías en mil pedazos, solo las arrojó más allá de la muralla que rodeaba Jerusalem. Aparentemente, el motivo por el que él no hizo añicos las idolatrías era por su elevado costo y por la gran pérdida monetariaque implicaba su destrucción. Pero Rashíesclarece que “ése es el motivo por el queel hijo de Menashé, cuando subió al trono,volvió a hacer el mal a los ojos de Hashem”. Él volvió a colocar aquellos ídolos en el lugar de donde su padre los había quitado, y el pueblo volvió a idolatrarlos. Si el rey Menashé hubiera hecho añicos todas las idolatrías, quizá su hijo, a falta de ídolos, no se habría animado a comprar imágenes nuevas para adorarlas.

No obstante, puesto que aquellas idolatrías estaban a disposición del otro lado de la muralla, volvió a idolatrar las imágenes que su padre había adorado antes de hacer teshuvá. La santificación de Hashem es el rompimiento de la voluntad particular de la persona por completo; a pesar de la dificultad y la pérdida monetaria, debemos hacer solo la voluntad del Creador. Y así como un hombre puede gastar mucho dinero para comprar un etrog embellecido, o para comprar las mitzvot en el Bet Hakenéset (la apertura del Hejal, el transportar el Séfer Torá, las subidas a la lectura de la Torá, etc.), así mismo tiene queexterminar el mal que se posa en su bolsilloy en su casa, aunque ello le haya costadomuy caro y la pérdida sea grande, porque de esa forma demuestra que él ama muchoa Hashem Yitbaraj, y no hay fortuna que seinterponga en su amor por Él.

Un avrej que se sienta a estudiar Torá todo el día también hace una santificación en público, pues todo hombre desea salir en busca de la forma de sustentar a su familia, adquirir propiedades y objetos que le faciliten la vida, como tener un carro, un apartamento lujoso, y tantas otras amenidades de las que este mundo terrenal está repleto. No obstante, el avrej se dedica voluntariamente a servir al Creador del Mundo y se basta con poco, con tal de poder cumplir con la voluntad del Creador y sentarse en la yeshivá o el colel, y estudiar Torá día y noche. No hay santificación del Nombre de Hashem como ésa. Y aun cuando no haya quien lo vea, de todas formas, Hakadosh Baruj Hu ve sus actos y considera a dicha persona como uno que está cercano a Él. Incluso la esposa que es abnegada y exhorta a su esposo a continuar estudiando Torá tiene una gran recompensa en el cielo, y también ella será considerada como de los cercanos a Hashem Yitbaraj. Cuando cada persona llegue, después de sus 120 años sobre la tierra, al mundo que es todo verdad, todo lo que deseará es acercarsecuanto más pueda al Creador, y deleitarse del esplendor de Su Shejiná. Pero Hakadosh BarujHu no dejará que se le acerque sino solo a aquel que anuló su voluntad personal e hizo la voluntad de Él, porque solo a esta persona se la puede considerar como verdaderamentecercana a Hashem.