Reseña biográfica de un mujer sefardí que además de manejar muy bien sus negocios era considerada una de las mujeres más cultas de su época.
La prolífica estirpe de los Sassoon, rica en personajes para la Historia y rica en libras esterlinas, también dio al mundo mujeres dignas de recuerdo e incluso modelo de actitud. Es el caso, por ejemplo, de Flora Sasson, también conocida como Freja ( de Péraj, flor)
18 de noviembre de 1859, Bombay -o Mumbay- . Los soldados de la Compañía Británica de las Indias Orientales se rebelan. Y nace Flora Gabai , hija de Ezequiel Abraham Gabai , comerciante judío de Irak, y de Aziza Sassoon. Ambos judíos sefardíes de Bagdad que abandonaron la decadencia otomana en Mesopotamia para pasar desde el puerto de Basora a La India de la colonia británica. Por vía materna, como el resto de sus once hermanos, era nieta del barón Alberto Sassoon, y así pues, bisnieta del patriarca de la dinastía, David Sassoon.
Su educación fue tan esmerada que estudió, por un lado, en un colegio católico para señoritas -para recibir una educación occidental- y a la vez, con rabinos traídos ex profeso desde Bagdad, se formó en Torá y Talmud. A los 17 años dominaba el hebreo, el arameo, el judeo-árabe, el hindi, el francés, el inglés y el alemán. Un periódico de Australia, en un momento dado de su vida, la declaró la mujer más culta del momento.
También era muy devota. No viajaba jamás sin hacerse acompañar , primero, de un shojet privado (matarife) y , después, de un minián (quórum de una decena de hombres, requisito para el rezo hebreo) Y escribía y publicaba artículos sobre Rashi… También fue gran sionista: siempre dispuesta a sufragar con su enorme fortuna, toda causa que favoreciera el regreso del Pueblo Judío a Sión.
En 1876, se casó con Solomon David Sasson -su primo segundo, que llevaba los negocios de la familia en China y pasó a la sede central en Mumbay . El feliz matrimonio tuvo tres hijos: David, Rajel y Mozelle.
Su fortuna fue usada con fines filantrópicos de muy distinta índole: por ejemplo, sufragar las investigaciones en la lucha contra el cólera de Mordejay Hafkine.
Tras enviudar, en 1894, abandonó Mumbay y se instaló en Inglaterra por razones de salud: la hija pequeña había enfermado y era tratada en Londres, así que la familia acabó por instalarse allí.
Sus hijos levantarían la comunidad iraquí en Londres mientras ella llevaba las riendas de los negocios heredados del padre (lo cual era un hecho inaudito para la época) Su casa era también un salón para las personalidades más ilustradas del momento y el lugar.
En 1910 el matrimonio protagonizó el evento del año en la comunidad judía de Bagadad, pues pasaron Rosh Ha´Shana y Kipur allí. Dicen que durante los tres meses que duró la estancia era tal la reverencia que se tenía sobre ella que se le otorgaba el honor de subir a leer La Torá como a cualquier hombre de la comunidad. Y además fue nombrada rabina.
En 1924 presidió , con honor de ser pionera en ello, el Congreso Anual de la Comunidad de Londres, donde dio un discurso en el que alzó la voz contra la situación de las mujeres en el rabinato.
Se carteaba con los principales rabinos de todo el mundo, con quienes debatía cuestiones talmúdicas de toda índole, e incluso fue a visitar a algunos, como el jajam bashi de Damasco. A su regreso a Londres visitó en 1925 Jerusalén, que a la sazón vivía bajo el Imperio del Mandato Británico.
Murió por causas naturales en 1936, en su mansión de la calle Bruton, en el elegantísimo barrio de Mayfair, Londres; pero está enterrada -con su hijo David- en el Monte de los Olivos , Jerusalén.
Junto a Judith Montefiore y Rachel Morpurgo, fue una de las aristócratas judías plenamente imbuidas en el marco de lo hebreo.