IBN GAVIROL, PAYTÁN Y POETA

Breve nota sobre una de las figuras clave de la intelectualidad hispano-hebrea en la llamada Edad de Oro.


Nosotros le conocemos hoy como Ibn Gavirol (la palabra guever, en hebreo, hombre,  de donde gavri, masculino,  lleva daguesh en bet, por lo que es un error escribirlo con /b/ pero se arrastra esa transliteración de origen anglosajón) No obstante, en hebreo, su nombre fue -y es-  rabí Shlomó ben Yehudá ibn Gavirol רבי שלמה בן יהודה אִבְּן גַבִּירוֹל.  En árabe, que esa fue su lengua madre, Abu Ayyub Sulayman bin Yahya bin Yabirul. Es decir, Ayub, lo que por corrupción lingüística en español conocemos como «Job»  Shlomó, hijo de Yehudá

Filósofo y poeta, nada mejor para conocerle que escuchar su arte, pro ejemplo en este piút suyo que se canta en el servicio  de Shajarit de rito sefardí en el mo´ed de Pésaj en la Amidá, cuando se ruega por el rocío, esa gran metáfora de la literatura rabínica. (Transliteración hebrea al castellano según sistema lingüístico de Iacob Hassán, del CSIC, y que es el que debe usarse en tan altas cumbres)

Traducción:

Gavirol , que provenía de una familia cordobesa que se fue de allí en 1013, fue a nacer en Málaga, hacia el año 1021, en los convulsos años del cambio de milenio en la Península Ibérica:  el Califato de Córdoba pone fin a su esplendor y el Al-Andalus se fragmenta en una seria de más o menos mayores reinos de taifas. Cuando Gavirol tiene la corta edad de 10 años,  como también hará la familia de Maimónides cien años después, la familia abandona el ardiente sur de la península ibérica -un lugar que se vuelve inseguro- y emigran al norte. Jamás volverá a Málaga, por mucho que hoy relacionen esa ciudad de origen fenicio con Gabirol, como de igual manera relacionan Córdoba con Maimónides. La historia del judaísmo no lo es del turismo. Reducir el judaísmo a turismo es empobrecer lo hebreo de manera incomensurable.

En el caso de los Gavirol, la familia se radica en la enorme taifa de Sarakusta, Zaragoza, que se extendía en su mejor momento hasta lo que hoy es Benidorm y casi hasta  al ciudad de Barcelona, ocupando todo lo que hoy es Aragón, excepto las taifas de Albarracín y Alpuente y los territorios reconquistados en lo que es la falda de los Pirineos.

Cuando los Gabirol van a Zaragoza reina la taifa la dinastía tuyabí, con Mundir II, quien tiene como visir -especie de primer ministro-  a un judío: Yekutiel Ben Yitzjak. Este, al igual que a fines del siglo anterior hiciera en Córdoba Jashdaí Ben Saprut, quería que Zaragoza acogiera a los más altos sabios y literatos de su tiempo, hacer de Zaragoza una luz mundial que iluminara el intelecto y fuera una gran metrópoli de sabiduría y riqueza.

El padre del pequeño Ayub Shlomó, que era hombre rico, puso a su retoño a estudiar con el protegido de Yekutiel, Yoná ibn Yanaj, discípulo de la escuela de gramáticos de Córdoba , en especial de Menajem ben Saruk, autor del Majberet, una obra que comienza a sistematizar el estudio de la lengua hebrea de la forma con que nosotros lo estudiamos hoy mismo. Yoná (paloma en hebreo) hizo volar este estudio a una cota muy alta escribiendo el Sefer ha´Dikduk, el Libro de la Gramática. (Lo traducirá muchos años después, en el S XIII,  Ibn Tibbon , para que los hermanos Kimji terminen de sistematizar el sistema trilítero de la lengua hebrea) Con semejante maestro no fue difícil que aflorara el talento literario de Gabirol.

Gabirol tenía un carácter especial, que podríamos llamar arisco. Además de no tener gran porte, su piel sufría una enfermedad entonces intratable, parece ser que lupus vulgaris, una especie de sarna que afeaba mucho su rostro. Este contratiempo físico le convirtió en una persona bastante retraída, escondida del mundo, pero con un objetivo: buscar su propia belleza no en lo físico sino en la belleza intelectual. Y llegó a tener de su capacidad literaria tan gran estima que no dudaba en enorgullecerse de ello, siempre queriendo ser considerado como el mayor poeta de su tiempo. Y lo fue. Pero no toleraba que nadie se acercara a su altura, por lo cual criticaba mucho las obras de los otros, creándose gran número de enemistades. Versos como : » No tienes cuello para ponerte mi collar» , «Se creen gigantes y a mí me parecen saltamontes»

Sus palabras sobre la envidia dicen esto:

 

Gran parte de su grandeza viene por su condición de filósofo neoplatónico – cuyas tres hipóstasis , que parten todas de lo Uno, él identifica con Dios, de lo cual derivan las otras dos, el Logos (la Torá) y el alma.  Por eso su obra Fons Vitae, la fuente de la vida, (versículo diez del salmo XXXV) donde la fuente es Dios. Gabirol llevó al judaísmo a Platón (por eso fue tan admirado por los cristianos, que le estudiaron con profusión) Maimónides hará después lo mismo pero con Aristóteles.

Pero esta filosofía neoplatónica de Gabirol, si bien expuesta y argumentada magistralmente en Mekor ha ´jaím, traspasa su obra asta florecer en su poesía con una obra cumbre, Keter Malkut, «La Corona Real», de quien disponemos traducción de lujo por obra de vejez de uno de los escritores judíos españoles más relevantes y olvidados, Rafael Cansinos Assens.

Una muestra de sus versos con imágenes del palacio de la aljafería, hoy sede del Gobierno de Aragón, por el cual él transitó tantas veces:

Acceso a  Corona Real, en pdf keter malkut

 

Además de su poesía filosófica, también cultivó el verso profano al más puro estilo andalusí,, pero sin embargo, como no puede ser de otra forma, en el orbe judío, en especial para el mundo sefardí, pasa a la historia como gran compositor de piutím, y sus versos litúrgicos, abundantes y enormes, son aún cantados en sinagogas de todas partes.

La fortuna de Gavirol en Zaragoza cambió de pronto. Un primo del rey tuyubí de la taifa zaragozana da un golpe de estado, instaurando la dinastía hudí; en la revuelta asesina también al visir, Yekutiel. Gavirol siempre cantará elegías por esta pérdida inestimable, que  le deja sin amparo, sin mecenas.

Después  de estos sucesos de 1039, pasó por un tiempo a Granada, como preceptor de YOsef, el hijo del nasí , o príncipe de los judíos de Granada.  Pero abandonó Granada por disensiones con Nagrella, parece ser por envidias literarias, y regresó a Zaragoza. Pero allí, sin el  favor de Yekutiel, no le fueron bien las cosas y parece ser que tuvo deseos de irse a Jerusalén, pero nada se sabe de esto y aunque desde 1045 se le pierden sus pasos, lo más que sabemos es , por una leyenda, que murió asesinado en Valencia ,por un musulmán en 1057 o 1058, con apenas 30 años de edad, según cuenta ibn Said de Toledo y nos recuerda Millás Vallicrosa, el mayor editor español de la obra de Ibn Gavirol.

Entre su poesía netamente religiosa, sencilamente sublime, según Menéndez Pelayo,  está a la misma altura que Yehudá Ha´leví o a niveles europeos el mismo Dante, siendo maestro del computo bíblico y la tradición midrásica , con exhortaciones, redenciones (poemas llamados Gueulá) como la muy conocida para el Shabat cuarto después de Pésaj.

Y por supuesto su presencia en la vida musical de nuestro tiempo

El siguiente poema es una reshut de las más conocidas. Es la introducción al poema “El alma de mi vida” Neshamat Kol Jayai, una especie de permiso del Jasán de la sinagoga antes de rezar Neshamat (que se canta en las sinagogas sefardíes hasta hoy) El sentido profundo de La Aurora es iluminar las partes más oscuras del alma judía.

Aquí una interpretación  magistral, de nuestro tiempo,  a cargo de  un grupo turco que de cantar en las calles ha pasado a ser una de las revelaciones de la música étnica de los últimos años, Light in Babylon, con la voz de Mijal Elia Kamal y sus compañeros.

 

Con la aurora, Te busco , mi roca y mi fortaleza

Todas mis oraciones de la mañana y la tarde te ofrezco

Asustado ante tu grandeza

porque tus ojos pueden leer mis pensamientos

Qué es esto que el corazón y la lengua pueden producir

y qué soy yo sin la fuerza de mi espíritu

He aquí el canto del Hombre que te será agradable

Te agradeceré  mientras en mi alma esté  EloKim.

Este post está realizado con material de los Encuentros con la cultura judía que auspicia todos los jueves la comunidad judía de Asturias, Beit Emunáh.