LOS JUDÍOS DE SEGORBE

Notas sobre una aljama valenciana de la que sólo quedan datos archivísticos y ecos de la memoria en la comunidad sefardí de Estambúl.


La preciosa localidad de Segorbe, en la comarca del  Alto Palancia, al sur de la provincia de Castellón (Valencia) también tuvo una judería  en la Baja Edad Media. La ciudad -una de las tres que entonces tenía esta categoría en el reino valenciano, junto a Valencia y Játiva- situada en la tradicional vía de comunicación entre Aragón y el Mediterráneo, era punto clave de la Ruta de la Lana, que iba de Alicante a Burgos; además de la lana y el cuero, en Segorbe se comerciaba con vino,  cereal, metal y cerámica.

No se sabe mucho de los judíos segorbinos poque tampoco eran muchos -algo así como el 2% de la población total a mediados del S XV.

A finales de los años ´70 del S XX , J Regné estudió las regestas del S XIII -copias de documentos papales en archivos especiales- pues Segorbe siempre ha sido cabeza de diócesis. En estos documentos se mencionan los años en que la aljama segorbina debe pagar sus impuestos (1274, 1280, etc…) Luego, a finales de los ´80, V. Gª Edo aportó una lista de judíos segorbinos en 1286, citados con la siguiente grafía en el estudio de J. Aparici Martí : Simuel Abenafia, Jucef Abençeprut, Ezmell Almorcat, Açach Axivil, Mossé Argentero, Abrafim Muçeyf, Jucef Sorcor, Astruch Xucrán y Yuçafiel.

Salón de plenos del ayuntamiento, con artesonado en forma de Estrella de David

Los doctores  Hinojosa y Magdalena -grandes nombres del estudio de las juderías valencianas-  estudiaron , el primero los miembros de la familia Toledano que vivieron en Segorbe; el segundo, a través de una responsa de Rabí  Yitsjak  bar Seset Perfet a la aljama, la judería en sí. Magdalena habla de un cierto problema con un préstamo de los mudéjares a los judíos para que estos pudieran recuperar las coronas de un Sefer Torá. Hinojosa, además, encontró el caso de una denuncia de los judíos de Segorbe a doña. María, procuradora del infante D. Martín, señor de Segorbe. En esta demanda se solicitaba justicia ante el hecho de que algunos judíos estuvieran comprando vino fuera de la ciudad para venderlo en Segorbe, creando menoscabo a los vinateros de la aljama segorbina, que pagaban religiosamente sus impuestos por tener  y cuidar los viñedos de los que hacían su vino. Estos judíos que compraban vino a terceros podría n sr Astruch Alorquí, judío de Llíria con orígenes en Lorca, y su hijo Jucef, de Segorbe, pues según contrato de octubre del 1386 adeudaban la compra de vino y hasta el alquiler de las cubas. Que estos asuntos quedaran grabados en los archivos nos da una idea sobre los temas que ocupaban sus conversaciones a las puertas de la sinagoga y en los puestos del mercado.

Aparici Martí dice que en los archivos municipales y catedralicios se consigue encontrar una nómina de 81 almas: 7 mujeres (viudas?)  y 77  hombres , de los cuales 23 son judíos y 54 conversos, con una gran preponderancia de las familias Pardo, Medina y Vicent, mercaderes con procesos inquisitoriales. De esas 81 personas, 61 eran segorbinos, 2 valencianos, 3 saguntinos , 1 de Liria y doce de origen desconocido. Sus oficios, según Aparici,  eran todos relativos a la adminstración de la aljama: dos rabinos, siendo sólo uno segorbino (Samuel Abinpesat y Jucef Façán), un baile local -regidor de la villa-  (Jucef Abençeprut), un par de corredores (Mossé Ardit y Jucef Barbut), el administrador de cuentas del conde  (Mossé Nagerí) y dos argenteros (Atzageig, de Valencia, y Mossé), así como de un tafonero (encargado de una almazara de de aceite de oliva)  (Jucef Abencabal)

Plazoleta en la antigua judería segorbina

La judería de Segorbe no fue asaltada en la ola de masacres antijudías de 1391. O al menos no consta en archivo alguno, mientras que sí consta que, sabedor de la funesta suerte que había corrido la de Valencia, el infante Martín envío una carta a principios de julio de 1391 ordenando la seguridad de los habitantes de la judería (no fuera que se perdiera gran número de pagadores de impuestos…) Si bien nunca nadie consignó conversiones de judíos segorbino después de esa fecha sí es cierto que en el censo de 1401 ya no aparecen sino conversos como Ramón de l’Ort casado con Violant, Pero Sánchez de Berbegal, Joan Vicent, y Daniel d’Hucanya, mientras que en el censo de 1420, aparecen nombres judíos, Salamón Abencabal, argentero; Samuel Cap, argentero; e Isaac Çufer – Sofer-  (J. Aparici, 1999).

  Como anécdota, mencionar que en Segorbe hay una canción de cuna tradicional conocida como Nada del Palancia (el río Palancia) que el hebraísta castellonense Francisco Bellido encontró en el repertorio musical de la comunidad sefardí de Estambúl. La nana, en ladino, alterna con términos hébreos evidentes rasgos de aragonismos como el diminutivo en «ico» (una muestra más que constata la barabridad de decir que el ladino es castellano del S XV, y que hasta entidades judías difunden por ignorancia) Este mismo investigador también se encontró con que los sefardíes estambulitas  eran conocedores de la leyenda segorbina del Arbol de la Sabiduría, que relata la historia de habla de un mancebico segorbino que , habiendo oído de tal árbol pero  sin poder  dar con su paradero,  buscó en otros reinos y países lejanos, donde aprendió oficios, lenguas y culturas;  cuando desistió de la búsqueda, regresó a Segorbe , se encontró de nuevo  con el anciano que le había hablado de aquel árbol y éste   le hizo ver que el árbol de la sabiduría está en el interior de las personas que están interesadas por aprender.

El ayuntamiento de Segorbe, encantado con la recuperación de la memoria hebrea en su municipio, dispuso crear una placa con las estrofas de dicha nana, con una mención a los sefardíes de Estambúl, en la replaceta de Barrimoral, aledaña a la antigua judería.

También debemos señalar que en Segorbe está ubicada la Fundación Max Aub (Ahuv, amado) escritor judío, de oríegenes franco-alemanes, cuya familia huyó de la Primera Guerra Mundial asentándose en Valencia. En su obra relata hechos de la guerra civil española en la zona de Segorbe, consistorio que  adquirió  la Biblioteca, Hemeroteca y Archivo personal de Max Aub, que llegó a Segorbe en octubre de 1990, creando en 1997 la fundación, dirigida por su propia hija Elena, z´´l.